[[Hay gente esclava de sus palabras, de sus deseos, de sus pensamientos...
sus manos están atadas con esparto a su corazón y a su cuello,
se ven arrastrados y no se dan cuenta.
Otros sin embargo, somos libres. Pensamos lo que queremos,
comprendemos nuestros deseos sin darles el control de nuestra vida,
cargamos con el corazón con resignación y no con pena...]]
1 comentarios:
Hoy he observado unos pétalos de almendro volando sin sentido entre el viento, pero no era entre el viento si no con él y no era vuelo sin sentido, por eso los miraba cuando nadie les veía.
Estaban bailando imperiosos dos en uno con una belleza inaudita. Sonreí. Nadie les miraba y por eso danzaban con una música que nadie oía. Volví a sonreír. Hoy sería un día diferente porque había una extraña música en el viento.
Si,... nadie les veía.
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